Todas las ideas raras de David Ricardo y Karl Marx sobre el valor determinado por el trabajo incorporado en una mercancías son, aparte de las centenares de razones ya mencionadas, erróneas porque un porcentaje muy grande del PIB son servicios y el resultado de un servicio no es una mercancía en la cual puede ser incorporado un trabajo. El servicio es consumido en el momento de ser producido. Si un músico da un concierto este concierto es consumido en el momento de ser producido. Posiblemente queda una experiencia eternamente clavada en la consciencia del público, pero seguramente ningún trabajo incorporado. Say es el único que menciona el carácter de los servicios. (Adam Smith con sus trabajos productivos y improductivos está completamente equivocado, lo que se debe al estrechamiento de la perspectiva causada por la obsesión con el ahorro, vea trabajos productivos / improductivos.)
Un médecin vient visiter un malade, observe les symptômes de son mal, lui prescrit un remède, et sort sans laisser aucun produit que le malade ou sa famille puissent transmettre à d'autres personnes, ni même conserver pour la consommation d'un autre temps. L'industrie du médecin a-t-elle été improductive ? Qui pourrait le penser ? Le malade a été sauvé. Cette production était-elle incapable de devenir la matière d'un échange ? Nullement, puisque le conseil du médecin a été échangé contre ses honoraires ; mais le besoin de cet avis a cessé dès le moment qu'il a été donné. Sa production était de le dire ; sa consommation, de l'entendre; il a été consommé en même temps que produit. C'est ce que je nomme un produit immatériel |
Un médico visita un enfermo, examina los síntomas de su enfermedad, le prescribe una medicina y se va sin dejar un producto que el enfermo o su familia podría pasa a un otro. Ni siquiera se lo puede guardar para usarlo más tarde. Era por eso la actividad de médico improductivo? Quién podría creerlo? El enfermo fue saneado. Este producto no ha podido ser objeto de un cambio? No en absoluto, porque el consejo del médico fue cambiado por un honorario. La necesidad de este consejo dejo de existir una vez dado. La producción consistía únicamente en decirlo y fue consumido cuando fue escuchado. En el mismo tiempo en el que fue consumido, fue producido. Esto es lo que yo llamo un producto inmaterial. Jean-Baptiste SAY, Traité d’économie politique, Chapitre XIII, Des produits immatériels, ou des valeurs qui sont consommées au moment de leur production |
Mientras que para Adam Smith todo lo que no se "materializa" es improductivo, Say introduce los servicios y los servicios pueden tener carácter consumtivo o investivo. (La noción improductivo es raro de cualquier forma. Improductivo implica que algo es inútil, pero esta noción no significa nada. Los alimentos que se consumen son también inútiles, pero si no se come, se muere. El concierto mencionado arriba es inútil y improductivo, pero finalmente se produce las cosas para un fin "inútil", improductivo. De hecho la noción "improductivo" solo puede aplicarse si el fin es producir algo, pero los resultados no pegan con lo que se había esperado. El trabajo por ejemplo puede ser improductivo.) Igual que en el caso de "productos", o sea cuando el resultado se "materializa" en algo como en el caso de los servicios, que no se materializan en nada, se puede distinguir entre consumtivo y investivo. Un concierto es consumtivo, si dejamos al lado el hecho que un cierto nivel cultural puede tener un impacto sobre la vida social en general, y una asesoría de un informático para una empresa es investivo. El hecho interesante en la idea de Adam Smith no es que su distinción entre trabajo productivo y improductivo sea absurdo. Lo interesante es de ver como un concepto de base erróneo estrecha la perspectiva y lleva a conclusiones completamente erróneas. Say es correcto, aunque habría podido distinguir entre servicios de carácter investivo y servicios de carácter consumtivo.
Smith refuse aux résultats de ces industries le nom de produits. Il donne au travail auquel elles se livrent le nom d'improductif, et c'est une conséquence du sens qu'il attache au mot richesse ; au lieu de donner ce nom à toutes les choses qui ont une valeur échangeable, il ne le donne qu'aux choses qui ont une valeur échangeable susceptible de se conserver, et par conséquent il le refuse aux produits dont la consommation a lieu à l'instant même de leur création. Cependant l'industrie d'un médecin, et, si l'on veut multiplier les exemples, l'industrie d'un administrateur de la chose publique, d'un avocat, d'un juge, qui sont du même genre, satisfont à des besoins tellement nécessaires, que, sans leurs travaux, nulle société ne pourrait subsister. Les fruits de ces travaux ne sont-ils pas réels ? Ils sont tellement réels, qu'on se les procure au prix d'un autre produit qui est matériel, auquel Smith accorde le nom de richesse, et que, par ces échanges répétés, les producteurs de produits immatériels acquièrent des fortunes. |
Mientras que para Adam Smith todo lo que no se "materializa" es improductivo, Say introduce los servicios y los servicios pueden tener carácter consumtivo o investivo. (La noción improductivo es raro de cualquier forma. Improductivo implica que algo es inútil, pero esta noción no significa nada. Los alimentos que se consumen son también inútiles, pero si no se come, se muere. El concierto mencionado arriba es inútil y improductivo, pero finalmente se produce las cosas para un fin "inútil", improductivo. De hecho la noción "improductivo" solo puede aplicarse si el fin es producir algo, pero los resultados no pegan con lo que se había esperado. El trabajo por ejemplo puede ser improductivo.) Igual que en el caso de "productos", o sea cuando el resultado se "materializa" en algo como en el caso de los servicios, que no se materializan en nada, se puede distinguir entre consumtivo y investivo. Un concierto es consumtivo, si dejamos al lado el hecho que un cierto nivel cultural puede tener un impacto sobre la vida social en general, y una asesoría de un informático para una empresa es investivo. Jean-Baptiste SAY, Traité d’économie politiqueChapitre XIII, Des produits immatériels, ou des valeurs qui sont consommées au moment de leur production |
Si se quiere ver la cosa de manera más concreta. Incluso en un país altamente industrializado como Alemania el sector servicios brinda 69 por cientos al PIB. La industria propiamente dicho contribuye solo 25 pro ciento. La silvicultura y la agricultura solo contribuyen 1 por ciento. Estas cifras no atomizan todavía, dado que algunos servicios requieren mucho capital, la teoría neoclásica y Karl Marx, pero de hecho estamos, aparte de las centenares de otras razones, muy cerca de la automatización.
Jean Baptise Say es el único que reconoce el carácter de los servicios y los define como hoy en día se los define.
A la base de los conceptos erróneos de Adam Smith y otros en cuanto a los servicios se refiere es su concepto del ahorro.